Con danza y guardia de honor, reinauguran monumento a Cuauhtémoc en CdMx

La estatua, ubicada en el cruce de Reforma e Insurgentes, fue reinaugurada tras haber sido restaurada por los daños que sufrió en diciembre del 2020.

Autoridades del gobierno de la Ciudad de México reinauguraron el monumento a Cuauhtémoc, el último tlatoani mexica, ubicado en el cruce de Paseo de la Reforma y la avenida Insurgentes, en la colonia Tabacalera, donde se realizaron danzas y una guardia de honor.

La ceremonia de inauguración luego de que el monumento fue vandalizado en diciembre del 2020, cuando fueron dañados seis de los ocho pumas que se encuentran al pie de la escultura.

Sin embargo, tras ser restaurado hoy se realizó la ceremonia para presentarlo a la ciudadanía, en el marco de los 500 años de la caída de México-Tenochtitlán. La estatua está elaborada de bronce, mide aproximadamente cinco metros de alto y pesa 4.2 toneladas.

Representa a Cuauhtémoc en traje de guerra, con una diadema y penacho de plumas en la cabeza, y en su pecho lleva puesta una coraza de algodón y fue elaborada el 21 de agosto de 1887. En el acto participó el alcalde de Cuauhtémoc, Néstor Núñez López,  María del Carmen Castro Barrera, coordinadora nacional del INAH; Vanessa Bohórquez López, secretaria de Cultura, y Diego Prieto Hernández, director general del INBA.

“Nunca consolado, joven estremecido en las tinieblas metálicas de México en tu mano recibe el bien de tu patria desnuda en ella nace y crece tu sonrisa como una línea entre luz y oro. «La figura de Cuauhtémoc después de 500 años pervive en nuestra memoria como un hombre fuerte y valeroso entregado a la defensa de su ciudad y de su gente de la misma forma en que la resistencia indígena sigue presente hasta el día de hoy”, fragmento del poema Canto General de Pablo Neruda, expuesto por Vanessa Bohórquez.

Originalmente, la estatua se encontraba en la Plaza del Paseo de la Reforma y es en 1949, cuando es relocalizada en la interestación de las Avenidas Insurgentes y Paseo de la Reforma, en el año 2004 el entonces gobierno del Distrito Federal la regresó a su lugar de origen después de restaurarlo; este día, tras ser restaurado por especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia se contempla el monumento en plenitud.