Citi analiza comprar Deutsche Bank en México por su licencia
Citigroup está sopesando un acuerdo para comprar el banco mexicano de Deutsche Bank AG en medio de planes para establecer una nueva unidad local, a medida que abandona las operaciones minoristas en el país, según personas familiarizadas con el asunto.
La conversación sobre las operaciones mexicanas del banco alemán se encuentra en su primera etapa y es posible que no resulten en un acuerdo, dijeron las personas, que pidieron no ser identificadas por tratarse de un asunto privado.
Cualquier venta requeriría la aprobación regulatoria y Deutsche Bank mantendría su operación de corretaje que relanzó en el país a principios de este año, dijeron las personas.
“Citi ha operado en México durante más de un siglo y el país permanecerá entre los principales mercados institucionales de Citi fuera de Estados Unidos”, dijo un portavoz de Citigroup en un comunicado enviado por correo electrónico.
“Como hemos dicho, tenemos la intención de continuar operando un negocio bancario con licencia local en México a través de nuestro grupo de clientes institucionales y nuestra franquicia de banca privada”.
Un representante de Deutsche Bank se negó a comentar.
La directora ejecutiva de Citigroup, Jane Fraser dijo el mes pasado que la compañía comenzó comenzó el proceso de venta de sus divisiones de banca de consumo, pequeñas empresas y medianas empresas en México, aunque una oferta pública inicial sigue sobre la mesa. La unidad “está atrayendo mucha atención” y la empresa ha comenzado a captar el interés de los compradores en las conversaciones preliminares de ventas, dijo Fraser en ese momento.
Un acuerdo con Deutsche Bank facilitaría que Citi continúe ofreciendo servicios a grandes corporaciones y clientes con alto poder adquisitivo después de la venta, dijeron las personas. Obtener una licencia bancaria en México puede llevar años, a medida que el regulador bancario del país se ha visto obstaculizado por un éxodo de funcionarios experimentados durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Deutsche Bank había estado liquidando sus operaciones en México desde 2015, cuando decidió retirarse de 10 países. Tras dos años de conversaciones para vender sus operaciones al InvestaBank de México, la operación se canceló a fines de 2018 en medio de una disputa sobre el precio y después de que un accionista principal de InvestaBank fuera sentenciado en Estados Unidos por fraude fiscal.
La unidad local del banco alemán cuenta ahora con solo mil 600 millones de pesos en activos, en su mayoría deuda del Gobierno, y doce empleados, según documentos.