Emma Coronel, esposa del “Chapo”, salió de prisión y está bajo arresto domiciliario

Emma Coronel ya no estaría en la cárcel, sino que cumpliendo su condena bajo prisión domiciliaria, en Los Ángeles, California. La esposa de Joaquín, el “Chapo”, Guzmán, ya no se encuentra bajo el resguardo del Buró de Prisiones de Estados Unidos, informaron varios medios estadounidenses. Aunque le permitirán salir, sigue su proceso judicial.

Según dichos reportes, la mujer, acusada de narcotráfico, estaría bajo arresto domiciliario desde el pasado 30 de mayo. Su ubicación sería su domicilio particular en Los Ángeles. Ahí, terminaría de purgar su sentencia, toda vez que se le condenó a 3 años de prisión el 30 de noviembre de 2021, debido a que se le responsabiliza de tres cargos relacionados con el tráfico internacional de drogas.

¿De qué delitos acusan a Emma Coronel, esposa del “Chapo”?

A Emma Coronel se le acusó de los delitos de asociación ilícita para traficar cocaína, metanfetaminas, heroína y marihuana. Además, de lavado de dinero y participación en transacciones de propiedades pertenecientes a un narcotraficante.

¿Quién es la esposa del “Chapo”?

Emma Coronel, sobrina de Ignacio Coronel, uno de los líderes del Cártel de Sinaloa, nació el 2 de julio de 1989, en California, pero pasó casi toda su vida en México.

Se casó con el “Chapo”, 32 años mayor que ella, en 2007, cuando aún era una adolescente y con él tuvo dos hijas gemelas, Emali Guadalupe y María Joaquina.

Entre su boda y su arresto en febrero, Coronel se benefició “de múltiples maneras” y “a sabiendas” de las ganancias del tráfico de su esposo, según documentos judiciales estadounidenses.

A la mujer ayudó a “planificar y coordinar” la espectacular fuga de prisión del jefe narco en México a través de un túnel en 2015, señalaron los investigadores.

Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, el “Chapo”, quien aún es su esposo, era considerado el narcotraficante más poderoso del mundo hasta su arresto en 2016 y su extradición a Estados Unidos en 2017. Sentenciado a cadena perpetua en julio de 2019 en Nueva York, cumple su condena en la prisión de máxima seguridad ADX en Florence, Colorado.