EL PAN EN CDMX COQUETEA CON LA COMUNIDAD LGBT: “HAY QUE EVOLUCIONAR”
El presidente de Acción Nacional en la capital, Andrés Atayde, cuenta a EMEEQUIS que busca que su partido “camine dos o tres pasos hacia el centro” y haga alianzas con la diversidad sexual para poder ser competitivos y reemplazar a Claudia Sheinbaum.
En el Día del Orgullo LGBTQ+ 2021, un inesperado tuitero se unió a las felicitaciones para la comunidad lésbico, gay, bisexual, trans, queer y más: Andrés, 38 años, católico, heterosexual, padre de familia, mandó un mensaje a sus más de 17 mil seguidores: “En la CDMX el #AmorEsAmor y las libertades se ejercen”.
De inmediato, sus seguidores reaccionaron con asombro a su mensaje con el emoticón de un arcoiris: “¿te hackearon?”, “te van a quemar en leña verde”, “sí, claro…”. Y no era para menos. Andrés se apellida Atayde y es el presidente en la Ciudad de México de Acción Nacional, el partido conservador más importante del país y que históricamente ha votado contra los derechos de la comunidad LGBTQ+.
“Creo que el PAN, en el buen sentido, tiene que evolucionar”, suelta Andrés Atayde en entrevista con EMEEQUIS, a mes y medio de aquel tuit que generó polémica en las filas más conservadoras del panismo, pero que entre los blanquiazules chilangos se leyó como una postura que había tardado demasiado tiempo en llegar.
“No hay que olvidar que en la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México, en términos de la aprobación del matrimonio igualitario, la mayoría de los panistas votaron a favor y sólo tres en contra… hay un cambio importante”.
Andrés Atayde no es el único panista de nuevo cuño que parece alejarse del conservadurismo tradicional de Acción Nacional: la senadora Xóchitl Gálvez –quien aspira a gobernar la Ciudad de México– se ha pronunciado como aliada de la diversidad sexual y Mauricio Tabe –alcalde electo en Miguel Hidalgo y excoordinador de los diputados panistas en el primer Congreso de la Ciudad de México– votó a favor de criminalizar las llamadas terapias de conversión que atentan contra la dignidad de la comunidad LGBTQ+.
“Veo una tendencia en el PAN de la Ciudad de México de apertura, de estar abiertos y hasta de coincidir con posturas que tradicionalmente no lo hacíamos”, dice Andrés Atayde. “Ya son otros tiempos”.
El tuit de Atayde que generó polémica.
LA HISTÓRICA HOMOFOBIA
Pero esto no fue siempre así. Durante años, el PAN-CDMX fue un acérrimo rival de la diversidad sexual: en 2004, el partido blanquiazul votó contra las sociedades de convivencia, una figura jurídica que daría certeza a uniones civiles de parejas del mismo sexo. Y, en 2010, el panismo capitalino aplaudió que el entonces presidente Felipe Calderón usara a la Procuraduría General de la República para imponer un veto constitucional contra el matrimonio igualitario aprobado en la capital mexicana.
Sin embargo, esto ha cambiado tímidamente en los últimos años: en 2012, la candidata externa del PAN al gobierno de la CDMX, Isabel Miranda de Wallace, respaldó el matrimonio igualitario y en 2018, el PAN se unió al PRD y Movimiento Ciudadano para abanderar al mismo cargo a la perredista Alejandra Barrales, una abierta aliada de la diversidad sexual.
Es un cambio que va contra las viejas declaraciones de los cuadros nacionales del panismo: el exgobernador de Jalisco, Emilio González, aseguró que le daba “asquito” el matrimonio igualitario; y Luis Felipe Bravo Mena, exsecretario particular de Felipe Calderón, criticó a candidatos priístas por “homosexuales y de eso tenemos muchas pruebas”.
En el 2012, la candidata presidencial del PAN, Josefina Vázquez Mota, dijo ante la Conferencia del Episcopado Mexicano que el matrimonio de un hombre y una mujer “es el único matrimonio que conozco y el único que defenderé”.
Y dos referentes morales del panismo nacional son conocidos por su homofobia: el expresidenciable Manuel Clouthier solía decir que podían acusarlo de todo “menos de homosexual” y otro expresidenciable, Diego Fernández de Cevallos, criticó las cuotas de minorías porque luego habría que “incluir cuotas para los jotos”.
Atayde con la alcaldesa electa de Álvaro Obregón, Lía Limón.
PANISTAS HOMOSEXUALES
“Hace tres años levanté la mano para dirigir el PAN en la ciudad y dije que me interesaba hacer un PAN mucho más popular, más abierto y acorde a la realidad que se vive en la Ciudad de México. Es un tema de convicción personal que el amor es amor y que los derechos conquistados son derechos que desde el PAN respaldamos”, dice Andrés Atayde.
Además de lo político, asegura, se trata de un tema muy personal: en su familia –“panistas de toda la vida”– hay varias personas abiertamente homosexuales cuya orientación no es un tema en la mesa desde hace varios años.
“Y tengo una prima menor de edad que es trans y que está siendo muy apoyada por mi tía, mi tío, simpatizantes del PAN desde hace muchos años.
“Hoy tenemos muchos concejales, dirigentes, dirigentas, diputados y diputadas que son parte de la diversidad sexual y están en el PAN porque como partido somos un reflejo de la composición social… Al interior del partido hay muchos panistas gay y no es un tema para mí, salvo cuando se intentan violentar sus derechos”, dice.
Uno de ellos es el concejal electo por Álvaro Obregón, Guillermo Ruiz Tomé, abiertamente homosexual, quien hizo mancuerna en la elección del 6 de junio de 2021 con la ahora alcaldesa electa Lía Limón, quien en 2010 votó contra el matrimonio igualitario en la capital mexicana… y diez años después tuiteó en el Día del Orgullo LGBTQ+ del año pasado la etiqueta #Orgullo2020 y una bandera del arco iris ondeando en el aire en señal de apoyo.
UN PAN QUE CAMINA AL CENTRO
Al preguntarle a Andrés Atayde si el PAN capitalino se equivocó al votar contra los derechos de la comunidad LGBTQ+, del otro lado de la línea se hace un corto silencio. El dirigente necesita elegir con cuidado sus palabras para no inflamar las susceptibilidades de los panistas que hoy, aún en pleno 2021, quisieran volver a tiempos oscuros.
“Ese PAN tradicional es un PAN con el que no conviví tanto”, dice. “Cometería un error al emitir un juicio de valor al decir si estuvo bien o mal. Pero sí que nuestra generación ha mandado mensajes de apertura”.
¿Coquetear con la comunidad LGBTQ+ los acerca a ganar la jefatura de Gobierno?, le cuestiono y el joven panista dice que sí, pero asegura que no se trata de un cálculo político: en palabras de Andrés Atayde “en este tema hay convicción, no pragmatismo”.
“Dada la composición de esta ciudad, su propia historia, que el PAN camine dos o tres pasos hacia el centro, pues obviamente nos hace más competitivos”, revela con candidez.
Durante la conversación, una nueva autocrítica se asoma: el dirigente capitalino reconoce que algunos panistas han estado alejados de la realidad –no sólo en el tema de la diversidad sexual– y que el reto de cara a la elección del 2024 está en salir a las calles y ser empáticos.
“Tenemos que hacer un partido popular, no populista. Tenemos que acercarnos a la gente, que las personas no nos vean como un partido exclusivo de una o algunas clases sociales.
“Te lo digo abiertamente: la alianza va por el gobierno de la Ciudad de México. Va a buscar gobernar en el 2024. La variable clave está en gobernar bien, en que los nueve alcaldes que tenemos junto con el PRD y el PRI nos permitan contrastar cómo se gobierna bien y cómo se gobierna mal.
Y el sinuoso camino que lleva al Palacio del Ayuntamiento, reconoce, empieza con elegir a una buena candidata o candidato. Alguien que represente a un PAN que intenta abrirse a temas que antes estaban prohibidos o que rechazaban como doctrina.
“El perfil que propongamos, es mi opinión, creo que debe ser alguien del PAN que ya haya gobernado, con experiencia en gobierno”, delinea Andrés Atayde, el joven panista que sorprendió a los veteranos con un tuit.
“Y, claro, alguien abierto, plural… sí, yo te diría que, en mi opinión, sea alguien que pueda representar los derechos de la diversidad sexual”.