Otros 5 candidatos exponen en Palacio cómo echarán a la mafia del sindicato de Pemex

Al ceder tiempo –por segundo día– de sus conferencias matutinas, a los candidatos a ocupar la dirigencia del sindicato petrolero, el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a los integrantes del gremio a conocer todas las propuestas, porque a su gobierno le interesa la democracia sindical. Ayer expusieron Jesús Noé Castán, Pitágoras Cruz, Carmen de Dios Patraca, Miguel Arturo Flores y Édgar García. Cada uno expuso sus propuestas para echar del sindicato a los dirigentes que se apoderaron de él hace 30 años.

Jesús Noé Castán dijo: “El mejor secretario general del sindicato soy yo, un trabajador que conoce tus necesidades y problemáticas administrativas sindicales. Nuestra misión es concreta: abogar y procurar los derechos de los trabajadores con la firme determinación de acabar con el cacicazgo y la opresión”.

Enunció 10 propuestas, entre ellas, terminar con el cacicazgo y la relección; transparencia de las finanzas mediante la rendición de cuentas de las aportaciones y cuotas de sindicato; basificación de trabajadores con mayor antigüedad; exigir que los trabajadores cuenten con el equipo de protección personal que se requiere para el ejercicio de sus actividades; préstamos hipotecarios y administrativos; y no más moches.

Pitágoras Cruz pidió “al Presidente de la República, ya que esto es una queja que comúnmente tienen todos los trabajadores, que pueda checar el impuesto sobre el trabajo, ya que actualmente todos los trabajadores ya se le va todo en impuesto”.

Carmen de Dios Patraca sugirió que mientras “no se reforme la manera en que opera el sindicato y se reduzcan los gastos operativos de la empresa, nunca van a tener utilidad en su exploración y producción. Haremos una revisión y auditoría de los bienes del sindicato, los cuales, serán puestos a nombre de todos los socios por ser nosotros los dueños auténticos de dichos bienes”.

Arturo Flores dijo que en el sector petrolero “no puede haber un sindicato con líderes rodeados de lujo, mucho menos puede haber un sindicalismo para trabajadores consentidos y otro para trabajadores perseguidos. Pemex ha sido mi patria, el sindicato mi hogar y los trabajadores sindicalizados mi familia y a la familia se le protege, se le apoya, no se le explota, no se le engaña, no se le roba, como hasta ahora lo ha hecho la mafia en el poder”.

Édgar García Romero ponderó el momento histórico “que estamos viviendo y gracias a la intervención del Presidente, los compañeros petroleros esperamos la regeneración de este sindicato y seguir colaborando con nuestro trabajo y esfuerzo para el desarrollo del país”.