El aire de la CDMX es ‘veneno’… y la OMS ya nos reprobó
En la capital mexicana en el 2020 el promedio fue de 18.8 microgramos por metro cúbico, es decir, alrededor de tres veces más que las nuevas normas establecidas por la OMS.
El miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio a conocer ajustes drásticos sobre las pautas para la calidad del global del aire y es que se calcula que la exposición del aire contaminado provoca 7 millones de muertes prematuras y afecta a millones de personas.
La organización también dio a conocer que, este tipo de contaminación, es comparable a otros riesgos para la salud como la dieta no saludable y el tabaquismo.
El cambio en las pautas pone en jaque a la Ciudad de México, ya que si de por si los parámetros utilizados para determinar la calidad del aire nunca han sido demasiado rigurosos, ahora ante los ojos de la OMS estamos “reprobados” según las nuevas normas establecidas.
“Las normas en México son bastante laxas en comparación con las guías internacionales”, afirma Ricardo Torres investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la UNAM, para el periódico El País.
El año pasado se lanzó el Índice Aire y Salud, el cual es un criterio único para medir los contaminantes en el país, esté cuenta con cinco categorías: buena, aceptable, mala, muy mala, extremadamente mala.
El Índice Aire y Salud esta hecho con base en los parámetros de la norma oficial mexicana 172 de la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales; está basa sus intervalos en lo que era considerado bueno según la OMS en el 2005.
Las nuevas pautas de la Organización se vuelven más estrictas en lo que concierne a partículas de suspensión por menos de 10 micras de diámetro (PM₁₀), a partículas de menos de menos de 2.5 micras (PM₂.₅) y el ozono (O₃).
En la CDMX en el 2020 el promedio fue de 18.8 microgramos por metro cúbico, es decir alrededor de tres veces más que las nuevas normas establecidas por la OMS.
Según la norma nacional la calidad del aire es considerada buena si está no rebasa los 75 microgramos por metro cúbico, mientras que para la Organización Mundial de la Salud (OMS) la nueva norma es de 45 microgramos por metro cúbico.
Por otra parte si hablamos del ozono, la norma mexicana establece que se tolera 137.5 microgramos por metro cúbico, sin embargo, la OMS considera altamente riesgosos los niveles por encima de los 60 microgramos por metro cúbico.
“Creo que esto va a causar cierto escozor en el Gobierno de México porque vamos a estar cada vez más lejos de lo que recomienda la OMS” dice Torres dejando claro que ni el país, ni la Ciudad de México están preparadas para las nuevas pautas establecidas por la Organización.